Tamara Falcó ya tiene vestido. Y seguirá tieniendo, en parte, sello vizcaíno. Tras quedarse la semana pasada sin el diseño nupcial que iba a hacerle la firma bilbaína Sophie et Voilà, la marquesa de Griñón viajó el domingo a Nueva York para visitar el estudio de Carolina Herrera, gran amiga de su madre, Isabel Preysler. Allí mantuvo una reunión con el actual director creativo de la marca, Wes Gordon, para dar forma al estilismo con el que se casará el próximo 8 de julio en la finca El Rincón con Íñigo Onieva. En su viaje exprés, en el que estuvo acompañada por su estilista Blanca Unzueta, Tamara también pudo conocer al resto del equipo creativo, entre el que se encuentra la vizcaína Andrea Robredo Ruiz.

Andrea, que se autodefine como «peculiar y optimista», es una apasionada de la moda. Ha heredado el gusto por el diseño de su madre, Juana Ruiz, creadora junto a Garbiñe Urdampilleta de la reconocida firma de moda bilbaína Jota+Ge, que durante su larga trayectoria llegó a tener cuatro tiendas propias y a estar presente en 15 países. Esta getxotarra de 37 años estudió en el colegio Irlandesas de Leioa y después apostó por desarrollar su creatividad entre telas y agujas. Se licenció en Diseño de Moda en el Istituto Europeo di Design de Madrid. Y durante aquella etapa tuvo la oportunidad de formarse en la Central Saint Martins, considerada la mejor escuela de diseño del mundo. Allí también han estudiado, además de su jefe, Wes Gordon, grandes nombres relacionados con la moda, como Alexander McQueen, Stella McCartney o John Galliano. Hasta Antonio Banderas se ha formado en las aulas de esta meca del diseño.

La modista vizcaína, que habla inglés, italiano y francés, no ha dejado de aprender y perseguir su sueño. «Creer en ti misma te lleva lejos en esta industria», aseguró en una entrevista. También pasó por la prestigiosa universidad británica London College of Fashion. Y ha cursado un máster en Polimoda, la reconocida escuela de Florencia. Con esfuerzo y talento ha logrado despuntar en este mundo y trabajar para grandes casas como Coach, Gabriela Hearst, Óscar de la Renta, Ralph Lauren, Tom Ford y Miu Miu. Desde hace tres años, forma parte del equipo creativo de Carolina Herrera, donde diseña codo con codo con Wes Gordon.

Andrea, asentada en Nueva York, también ha vivido en dos grandes capitales de la moda, Milán y Londres. Cuando regresa a Euskadi, además de disfrutar de la costa vizcaína, se relaja tomando un té en el Hotel María Cristina de San Sebastián, donde desconecta paseando por La Concha o caminando por el Monte Igueldo.

Su vestido de novia… diseñado por ella

Con más de 1.500 seguidores en Instagram, Andrea comparte fotografías de sus trabajos, pero también sus viajes alrededor del mundo y planes con amigos. Publica algún retrato de su sobrina Izaro y momentos con su marido. De hecho, en su última publicación recuerda «el mejor día de su vida». La modista se casó el año pasado en Nueva York con un diseño creado por ella misma. Lució un espectacular vestido de corte sirena con un bustier drapeado del que nacen flores bordadas. El diseño incluye unas mangas caídas complementadas con un trabajado volumen en la espalda creado en gazar de seda e inspirado en Cristóbal Balenciaga. Llevó un velo bordado a mano con apliques de seda que incluía detalles especiales para la pareja: flores originarias del sur de Inglaterra, donde creció su marido, y ramas de olivo en honor al país de Andrea. Para la parte superior del velo, apostó por dar otro toque personal al bordar abejas, libélulas y distintos pájaros que han contemplado en sus viajes.


Los diseñadores Wes Gordon y Carolina Herrera.

Wes Gordon, pasión por la moda y su familia

Antes de cumplir los 30, Wes Gordon se convirtió en director creativo de la firma internacional Carolina Herrera. Su pasión por la moda le viene desde pequeño. Disfrutaba escogiendo la vestimenta de su madre cada mañana antes de ir a trabajar. En la adolescencia aprovechaba el verano para aprender a coser, una afición que le llevó a Londres, donde estudió en la prestigiosa escuela de diseño Central Saint Martins. En 2009, nada más graduarse, fundó su marca homónima con la que empezó a vender en los exclusivos almacenes Harrods, Saks Fifth Avenue y Bergdorf Goodman.

Desde que debutara en Carolina Herrera con la colección de primavera-verano 2019, ha despuntado con un estilo más relajado, divertido y moderno, que cuenta con la aprobación de grandes ‘celebrities’. Es el autor del dos piezas rosa que Letizia lució en la coronación de Carlos III y de los ‘looks’ de famosas como Rosalía, Katy Perry, Michelle Obama o Meghan Markle. «Diseño para la mujer que vive cada minuto como si estuviera en la mejor fiesta del mundo», confesaba en una entrevista.

En 2017 se casó en Las Vegas con Paul Arnhold (38), artista del vidrio e inversor inmobiliario. De lunes a viernes viven en su apartamento del barrio de Chelsea, en Manhattan. Y los fines de semana se escapan a su casa de campo en Roxbury, Connecticut (EE UU), una granja de madera estilo cottage inglés construida en 1790 y que adquirieron hace ahora más de 10 años. Allí educan en el amor por los animales y la naturaleza a sus dos hijos, Henry, de dos años, y Georgia, de tan solo unos meses. Siempre les acompaña su perrita instagrammer Bird, que tiene 1.700 seguidores en la red social.

Enlace de origen : Andrea, la vizcaína que ayudará a diseñar el nuevo vestido de boda de Tamara Falcó