Competitividad, ambición y deseo constante por mejorar. Estos pueden ser tres rasgos que definen a un atleta de primer nivel como Juan del Campo. El bilbaíno, que a sus 29 años se ha convertido en uno de los grandes referentes de esquí alpino en este país, se estrenó el pasado fin de semana en otra edición de la Copa del Mundo, erigiéndose con un brillante vigésimo cuarto puesto en Gurgl, Austria. Se trataba de su segundo mejor resultado personal en una Copa del Mundo tras el vigésimo segundo logrado la temporada pasada. Algo que parecía poder superar incluso sus propias expectativas. Sin embargo, su carácter insaciable no le permite conformarse. «Estoy contento, pero no satisfecho. No hice las mejores bajadas que podría haber hecho. Mi nivel medio en los entrenamientos fue mucho más alto que en la carrera, sentimos que tenemos un margen importante de mejora», manifiesta a EL CORREO.
Desde pequeño ya era un competidor nato. De hecho, se puede decir que pronto dejó de ver el esquí como una actividad lúdica al uso. «Estaba en el típico cursillo de esquí en el que los niños van todos en fila india y yo no podía evitar estar todo el rato adelantando, entonces me recomendaron que compitiera», apunta. Así comenzó a fraguarse una carrera de mucho éxito, que le ha hecho ganar un campeonato nacional, participar en los Mundiales o incluso en unos Juegos Olímpicos. Ahora está completamente enfocado en la Copa del Mundo que ha comenzado con muy buenas sensaciones y es que ha experimentado una serie de cambios y progresos que le hacen sentirse ahora mismo en «el mejor momento de mi carrera», afirma.
Ha cambiado de material y ha encontrado en Alberto Arioli a su persona de confianza, quién le ha hecho dar un gran paso adelante. «Hemos intentado mejorar la técnica, han sido muchas horas extra de análisis y trabajo, entrenando mientras el resto estaban de vacaciones. Ha sido muy duro, pero la realidad es que se ha visto una progresión muy importante. Me presento en esta temporada con una mejora a nivel técnico, táctico, con más madurez mental, en mi mejor nivel físico y, sobre todo, con una confianza en lo que estoy haciendo y en mi equipo muy grande». Además, destaca que han crecido desde cero por el hecho de no tener referentes y ahora la experiencia les convierte en un equipo mucho más completo. Todo son estímulos positivos.
Por lo tanto, su objetivo es acorde a su buen momento y a la ambición que le caracteriza: «Llegar a las finales de la Copa del Mundo, es decir, estar entre los 25 mejores a final de año. Quiero llegar a la última carrera dentro de esos 25 y eso significa estar de forma recurrente no solo en los treinta, sino entre los quince o los diez y hacer buenos resultados», indica. Otra meta que se fija es «coger un dorsal de salida más pronto y estar entre los treinta o veinte primeros para poder competir en unas condiciones mejores de pista, que es muy influyente para nosotros», agrega. No hay nada más dentro de su mente que lograrlo. Después, ya tocará pensar en los Mundiales y los Juegos Olímpicos, los cuáles «siempre tienes en mente, pero tenemos muchos objetivos entre medias, toca ir escalando poco a poco, sin prisa, pero sin pausa», zanja.
Enlace de origen : Juan del Campo: «Mi objetivo es llegar a las finales de la Copa del Mundo»